domingo, 6 de noviembre de 2016

UNA NOTA BREVE EN TORNO A LA ÉTICA PÚBLICA Y LA EDUCACIÓN CÍVICA






Gonzalo Gamio Gehri  [1]


El artículo que presentamos[2] defiende la idea según la cual la formación en ética pública – la educación de los ciudadanos y de los funcionarios públicos – requiere de una pedagogía deliberativa, centrada en la adquisición y ejercicio del discernimiento, concebido como una práctica que orienta de vida de las personas e instituciones a partir del diseño y examen de argumentos. Esta pedagogía contribuye a formar ciudadanos libres, capaces de participar en la vida pública y vigilar la conducta pública de funcionarios y representantes.

La incorporación de la pedagogía deliberativa como modelo educativo tendría que ser considerada como una meta del Bicentenario del Perú como una República independiente. Resulta crucial desarrollar esta clase de educación ética si pretendemos afirmar prácticas democráticas en el país y reformar nuestras instituciones en clave de libertad y agencia política. Debemos superar el paradigma vigente en esta materia, a saber, la llamada ‘educación en valores’, que posee básicamente una matriz autoritaria. Pasar de la mentalidad de “súbditos” a la convicción de ser agentes de transformación en la vida pública.  

Estas reflexiones se enmarcan en el horizonte de la ética pública. Se trata de una disciplina que examina los principios, propósitos y modos de actuar que orientan la práctica política en un doble nivel, a saber, el de la administración del Estado en sus diversas facetas y funciones, así como el plano del ejercicio de la ciudadanía en los espacios públicos, disponibles tanto el sistema político y como las instituciones de la sociedad civil. La ética pública evalúa y discute prácticas de diverso cuño, todas relevantes para el curso de la vida en común: nuestros representantes son elegidos para diseñar y ejecutar políticas públicas en nuestro beneficio, o para ejercer funciones legislativas y de fiscalización en el Congreso. Los funcionarios del Estado desempeñan diversas tareas administrativas vinculadas al servicio público. Los ciudadanos son agentes políticos que debaten juntos, incorporan nuevos temas en agenda, defienden derechos ante el Estado, se organizan en diversos espacios de vida colectiva.

La deliberación es una actividad básica que evalúa y contrasta reglas, motivaciones y fines que orientan la acción de los agentes políticos y la vida de las instituciones.   La deliberación discute en qué medida la selección de determinados medios permite la consecución de ciertos fines, así como examina qué propósitos pueden pertenecer al fin o ser compatibles con un fin éticamente superior. Se trata de someter a prueba argumentos y convicciones sobre aquello que puede o no mejorar nuestras vidas y asociaciones.


Con frecuencia, se considera que los conflictos éticos realmente cruciales se plantean en términos del contraste entre el bien y el mal, lo que implica ciertamente poder distinguirlos. No obstante, es importante tener en cuenta que puede suceder que el bien colisione con el bien, y que el mal se oponga al mal. Situaciones en las que tenemos que escoger entre cursos de acción que se revelan como significativas y correctas, pero no podemos realizarlas simultáneamente. Tengo que elegir a sabiendas  de que estoy sacrificando – aún por buenas razones – opciones valiosas. De modo similar, en determinadas circunstancias debo discernir entre alternativas que percibo como negativas y lamentables. Identificar el mal menor constituye una tarea ética fundamental. Esta clase de conflictos se denominan “trágicos”.











[1] Gonzalo Eduardo Gamio Gehri es Doctor en Filosofía por la Universidad Pontificia de Comillas (Madrid, España). Actualmente es profesor en la Pontificia Universidad Católica del Perú y en la Universidad Antonio Ruiz de Montoya, donde coordina la Maestría en filosofía con mención en ética y política. Es autor de los libros Tiempo de Memoria. Reflexiones sobre Derechos Humanos y Justicia transicional (2009) y Racionalidad y conflicto ético. Ensayos sobre filosofía práctica (2007). Es autor de diversos ensayos sobre filosofía práctica y temas de justicia y ciudadanía publicados en volúmenes colectivos y revistas especializadas del Perú y de España.

[2] Este post es la primera versión de los pasajes iniciales del Resumen ejecutivo de mi presentación en Metas del Perú hacia el Bicentenario.

1 comentario:

Anónimo dijo...

http://grancomboclub.com/2009/06/una-reflexion-sobre-los-blogs-y-un-dato-interesante-sobre-la-coalicion.html